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“AGRADEZCO SER UN ANIMAL” (*)
PERO NO ACEPTO SER HUMILLADA
El Génesis II, originado en la mitología sumeria, dice: "Y el hombre dio nombre a todo el ganado y a las aves del cielo y a todas las bestias salvajes; pero para Adán ningún ayudante adecuado fue encontrado”. Los animales de laTierra habían sido creados para el estricto propósito de ser ayudantes de Adán, y Lilith estuvo entre ellos…

Lilith fue la primera mujer de los mitos de la creación del mundo, no era humana, sino animal, Adán la eligió por hermosa, pero luego, no pudo creer que ella se rebelara. Dios la echó del paraíso por rebelde y la amenazó con matar a todas las hijas que pariera. A lo que ella respondió que entonces devoraría a todos los hijos del hombre…

Acorraladas como animales somos malas, y podemos ser peores. Estamos fuera del paraíso, no tenemos honor (ya se sabe que el honor es macho) nuestra animalidad nos delata, nos enamoramos como adolescentes aunque no lo seamos, nos emocionamos “demasiado”, somos “ilógicas”… Como animales enajenados, muchas veces aceptamos el maltrato. Como animales peligrosos y rabiosos, otras veces, le ponemos fin a los malos amores.
También somos capaces de crear nuestros propios infiernos de género cada día, es cierto, pero nada de ello justifica la violencia contra las mujeres.

¿QUÉ SENTIDO TIENE CONTAR FEMICIDIOS?
Ninguna violencia, ni la económica que genera el neoliberalismo, donde las mujeres somos las más pobres de los pobres, ni la que generan gobiernos solapados que crean leyes que no nos nombran, como la Ley VIF chilena. Tampoco la violencia que generan las izquierdas que no reconocen la cuestión feminista como un problema político. Y menos que menos, se justifica el maltrato a cualquier mujer por el sólo hecho de no cumplir con el rol asignado.

Agresión por no hacer lo que una mujer (supone el macho) debe hacer, o agresión por hacer (de nuevo, supone el macho) lo que una mujer jamás debería hacer: abandonarlo, enamorarse de otro, no enamorarse de nadie y sólo irse, salir de noche, tener ideas en la cabeza, amar a otra mujer, no parir hijos, o parirlos cuando ella lo desea…

Y no estamos contando los femicidios que son muchos más de los que la prensa tradicional reconoce. (Homicidio es de Homo: Hombre, Femicidio es de mujer). No sólo las mujeres asesinadas por sus parejas y ex parejas son femicidios. Una prostituta asesinada por un cliente es femicidio, una mujer, no importa de qué edad ni de qué condición social, violada y asesinada por un extraño, un delincuente habitual o un vecino, es femicidio. Un hijo o hija asesinados por el padre para dañar a la madre tiene que ver con el femicidio. Una suegra, una hermana, un hermano, un padre asesinados por un varón para dañar a una mujer, tiene que ver con femicidio. Una lesbiana, insultada, golpeada o asesinada por amar a otra mujer, es femicidio.
¡Ahora cuenten los “casos”!… Parece tener más sentido que contarlos, mirar cómo es que pasa lo que pasa…

HOMBRES MATAN A MUJERES Y TAMBIÉN A HOMBRES…
Un hombre deja morir desangrado a otro, en la calle, ante cámaras de tevé, con carabineros que no intervienen y sólo “dialogan”. (Rara cosa que los uniformados justo en momentos como ese, desarrollen su capacidad de diálogo)… Los medios informaron: “líos de faldas”. Es decir, una mujer que se enamoró de otro, se define como un “lío de faldas”. Lo que automáticamente niega la libertad de la mujer y aprovecha de justificar cualquier salvajismo del varón “despechado”.
Fue el año 2001, el oficial retirado de Ejército Cristián Gómez (educado para matar) asesinó a Víctor Moenen, en 2001, en Viña del Mar.
Jorge Muñoz Riveros, delincuente habitual, de 30 años, mató a un joven, menor de edad, que los medios definen como “su rival en amores”. Fue en marzo de este año. En abril, un escolar de 16 años de San Joaquín disparó a otro. Alex hirió a Alan por “quitarle la polola”, como si ella fuera un objeto que pudiera robarse. Raúl Ulises Alfaro Ibarra de 27 años, mató en la comuna de El Bosque a otro hombre acusado de ser “patas negras” (junio 2007).

Los hombres se matan mucho entre sí, y no sólo por “líos de faldas”. Se matan en riñas, en apuestas, en borracheras, por plata, en el servicio militar, en la cárcel, en los ejércitos en épocas de paz, violan y matan a otros hombres que consideran más débiles (más femeninos).
La sobremortalidad masculina es un problema patriarcal. También mueren por hacer cosas de “muy hombre”: conducir muy rápido, hacer piruetas complicadas, demostrar lo “choros” que son…
En México hay estadísticas, y arrojan que entre los 0 y los 14 años por 100 niñas, mueren 132 niños y entre los 15 y los 29 años, la sobremortalidad masculina aumenta a 258 hombres por 100 mujeres.
Las muertes violentas de mujeres, en cambio, llegan a ser un 70, y son cometidas también por hombres: cada dos horas, en todo el mundo, una mujer es apuñalada, apedreada, estrangulada o quemada viva, por un hombre, su familiar, “para salvar el honor de la familia” (Amnistía Internacional 2000).

Si la construcción de género femenino es una maraña de manipulaciones, seducciones y controles solapados, la del género masculino parece una bomba exterminadora.

“SI NO ERES MÍA, ENTONCES DE NADIE”: MUY HOMBRE…
Héctor Mario Bravo Navarro, de 37 años, en una plaza de Loncoche, a las 2 y media de la tarde extrajo un cortaplumas de su bolsillo, tomó a Carmen, su ex esposa, del pelo y le dijo “Si no eres mía no serás de nadie” (consta en las actas del Tribunal del Juicio Oral en lo Penal de Villarrica, 6 de diciembre de 2002). Luego la acuchilló en el estómago muchas veces. Tenía orden de alejamiento, pero por otra parte, derecho a visitas a sus hijos.
Ella llevó a los niños a juntarse con el padre, los dejó con él y ya se iba cuando fue agredida. Casi muere. El homicida recibió 7 años de presidio mayor en su grado mínimo. La defensa de Bravo Navarro dijo que él era buen proveedor, buen vecino, y que tenía “irreprochable conducta anterior”… Es decir, traduzcamos: los golpes, malos tratos, humillaciones, que propinó a Carmen antes de intentar matarla, “no son reprochables”. El femicida luego, en la misma plaza donde ella casi moría desangrada, le dijo a un carabinero: "me tenía aburrido, además me engañaba"…
Bravo Navarro no es loco, es un femicida. La pericia psiquiátrica dice que es “egocéntrico, lúcido, sin alteración del juicio de realidad, con un coeficiente intelectual normal”. Es decir, eligió matar.

UN FEMICIDA PUEDE SER HONORABLE O HEROICO
Bravo Navarro presentó certificados de honorabilidad en el juicio. Tal cual: es un femicida frustrado “honorable”. Esto, según Miguel Valencia Rivas, Pastor de la Iglesia Evangélica Wesleyana de Loncoche, según doña Helga Bustos Bravo, dueña del local comercial Tiendas Helga's de la misma comuna, y según su patrón don Guillermo Muñoz V.
La familia de la víctima incluso lo define como “buen padre”, “responsable en sus obligaciones”, dicen que nada le faltaba a su familia… Aunque hay un detalle: Carmen se trató de suicidar y vivió continuas depresiones antes de separarse… El Tribunal destaca que el agresor es una persona extremadamente responsable y trabajadora, sin historial de violencia, sino “sólo antecedentes de desavenencias con su esposa”.

Cabrera Opazo, el femicida de Javiera se mostró como un heroico “luchador comunista” en el Centro de Justicia cuando declaró. Habló de su militancia política y de cómo su es pareja se habría derechizado, y entre las izquierdas hubo quienes lo defendieron diciendo que su acto brutal había sido resultado de la dictadura. Pobre de él que mató a una niña… Nadie en el PC alzó la voz para decir que no avala a este criminal…

Y el Estado, bueno el Estado con su parafernálica Ley VIF ni siquiera reconoce que existe el Femicidio ni la Violencia contra las Mujeres (tampoco el Maltrato Infantil). Las condenas son por parricidio. Escasamente se menciona la famosa “Violencia Intrafamiliar” que parece no actuar como agravante de nada...

CUERPO DE MUJER: RIESGO DE MUERTE, ABUSO Y ACOSO
Wilfredo del Carmen Novoa Jara, de Pocura, 42 años, fue acusado en el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Villarrica, por la hija de 13 años de su ex pareja, de abuso sexual. Unas conocidas de la familia se dieron cuenta. El abuso sucedió cuando la niña tenía 11. Según relatos de testigos la pequeña “pasaba enferma, lloraba y lloraba”. Fue examinada (otra victimización) en el Hospital de Villarrica y se advirtió antecedentes de abuso pero “no se puede precisar cuándo”…

Para que las mujeres o las niñas demostremos nuestra “inocencia” (pues cuando denunciamos a un varón, las acusadas somos nosotras) hay muchas dificultades. Sobre todo que los cuerpos sanan en apariencia (aunque los espíritus queden humillados, porque no tendremos honor, pero sí dignidad)… La niña declaró en el juicio: "porque el caballero a mí me violó" (hablando de Novoa Jara), pero no basta, nunca basta con nuestra palabra porque ya se sabe que vale menos que la del dueño del Paraíso.
Muchos harán juicios sobre la madre: ¡Y dónde estaba la madre!
"Mi mamá Lavaba en el río con mi hermano, quedándome sola lavando la loza, me fui a recostar y allí él me hace eso", cuenta. “La mamá la manda a despertarlo en la mañana y allí, éste le hace eso", cuenta una testigo.

¿La madre? Era golpeada constantemente por la joyita que tenía en la casa, ella igualmente reconoció que “lo quiere”… La dicotomía de las buenas esclavas: si fuimos expulsadas del Paraíso, entonces creamos nuestros propios infiernos de género y nos enterramos hasta el cuello en la mierda patriarcal…
Pero ojo, a no equivocarse que el violador es él. Definido por la pericia psicológica como alguien que “asocia roles parentales de acuerdo al género, con un padre proveedor y una madre dedicada al hogar, estableciendo relaciones de orden jerárquico dentro de la familia, donde el mayor poder lo tienen las figuras masculinas sobre las femeninas y los niños” (muy didáctico como discurso de género)… Y sigue: “sin sentido de crítica y autocrítica… falta de control de impulsos… incapaz de conectarse con sus propios afectos, por lo que malamente puede empatizar con los afectos y carencias de los demás”. Se trata de “una persona de juicio conservador, sin patologías psiquiátricas”…
Este varón modelo también tiene irreprochable conducta anterior, 541 días de reclusión en su grado medio, es lo que le tocó, menos de año y medio… (Villarrica 03 de enero de 2003).

NO HAY EDAD PARA LA VIOLENCIA, NI ETNIA NI CLASE SOCIAL…
Juana Angela Barattini Carmenglia, de 89 años murió el 23 de junio recién pasado en el Hospital Carlos van Buren de Valparaíso. Habría sufrido abuso sexual y robo. Un hombre se había ofrecido para ayudarle con las bolsas de las compras el día 17 de junio y la habría atacado.
María Nora Santana Paredes de 95 años fue asaltada, violada y degollada en su departamento de la calle Merced de Santiago, por Juan Humberto Solís Castro de 45 años conviviente de la cuidadora del edificio, el 9 de febrero de este año.

Lucrecia del Carmen Valdés Pereira de 54 años de Rengo, indigente, fue asesinada a golpes por su conviviente, “por no acceder a sus requerimientos sexuales” (8 junio).
Rosalina Santos Díaz de 58 años de Hualpin, IX Región fue asesinada por Ventura Santos Sanhueza de 62 a quien ella había denunciado por abuso sexual (29 de mayo).
Ana Luisa Novoa Armijo, de 73 años, fue asesinada en su casa por José Henríquez Novoa, de 70 años, quien vivía con ella en la localidad de Cabrero.
Francisca Curihual Millarrial de 55 años fue asesinada en Curaco por su esposo “por no servirle la comida” (8 mayo).
Margarita Luz Parraguez Díaz, fue apuñalada en Sarmiento, cerca de Curicó, por Francisco Javier Espinoza Calquen (8 abril).
Josefina del Carmen Collileo Huichacura de 40 años murió apuñalada a manos de su marido, Manuel Alberto Cariman Calfunao de 49 en Ancahual. El femicida “argumentó celos” (21 de marzo).
Angelina Navarro Gutiérrez de 45 años fue baleada en la cabeza por Héctor Orellana Roldán de 51 años, su ex pareja, en San Ramón, quién la “acusó de tener una nueva pareja” (20 de marzo).
Berta del Carmen Vergara de 78, fue asesinada a golpes por su marido Juan Guillermo F.T. de 68 años en Yerbas Buenas (14 de marzo).
Juana Melín Paillarin murió de un disparo propinado por su conviviente (3 de marzo).
Gloria Aravena Alarcón fue asesinada en Río Bueno por su conviviente (1 de febrero).
Rosa Ramos de 50 años fue apuñalada por su ex pareja Jorge Aguayo también de 50 años, en el sector Rodelillo de la Quinta Región de Valparaíso (24 de febrero).

Angélica del Carmen Márquez Vera fue apuñalada por su ex pareja, José Omar Cárcamo Almonacid que había estado en la cárcel por cuasi homicidio contra la misma Angélica, a quien ya había intentado matar de dos hachazos en 2003. En año nuevo el femicida fue considerado “apto” para ser beneficiado con permiso dominical y la salida la usó para matar a Angélica. Sus 3 hijos pequeños fueron testigos (4 de enero).

Olga de las Mercedes Solís Erhnfeld, profesora de 45 años fue asesinada por el agricultor Samuel Valderrama de la Maza de 67 años al interior del colegio donde ella trabajaba en Los Ángeles, VIII Región (3 de enero).
Teodolinda Reyes Retamales, definida como una próspera terraniente de la X región fue asesinada por su pareja Erwin Oyarzún en Los Muermos (22 de abril).
Edith Vásquez de Domingo, profesora, quien se perfeccionaba en la universidad, fue baleada en Maipú por su ex esposo Adasme Muñoz que argumentó “tener celos de la calidad de universitaria de su mujer” (15 de enero).
Gloria Jara Gacitúa de 26 años fue asesinada en San Joaquín por José González Vielma de 28 años, su conviviente (15 de mayo).
Juana Martínez Martínez de 25 años, fue lanzada desde un precipicio por Rubén Suárez Vivanco, su marido en Santa Bárbara, Región del BioBío (11 de mayo).

POLOLOS
Suma y sigue…
Brunela Bustamante de 24 años, fue apuñalada en el corazón por su pololo Jaime Alarcón de 32 años en Santiago. El femicida dijo que su polola “salía todos los viernes con las amigas” (23 de febrero).
Yasna Linares Huanta de 25 años, fue apedreada en la cabeza “por celos” por su pololo Gerardo Mollo Mamani de 35 años en Arica (1 de enero).
Angélica Valderas Cofré de 20 años fue violada y apedreada hasta morir por su pololo Cristóbal Galaz Olivares, de 18 años (2 de febrero).
Patricia Pradenas Ríos de sólo 16 años fue asesinada en Conchalí de un disparo de escopeta por su pololo también menor de edad (25 de febrero).

Con este panorama, a aquellos varones que elijan no violar, no acosar, no matar mujeres, no violentarlas, no celarlas, no burlarlas, no subyugarlas y asumirlas como seres libres e iguales, no los devoraremos (pierdan cuidado) el resto, pueden quedarse con su “Paraíso machista”. Las hijas de Lilith, tenemos el resto del mundo para construir.

* Del poema de Tatiana Lobo, Agradezco ser Mujer.

Victoria Aldunate Morales
Memoria Feminista
Feministas Autónomas
memoriafeminista2004@yahoo.es feministautonoma.blogspot.com