20/9/07

DERECHOS DE LAS HUMAN@S/DENUNCIA

Foto: Rosa Escobar "Atrapadas sin salida 1"
CARTA I

NO SOMOS VICTIMAS NI CULPABLES
En los Juzgados, Fiscalías y Carabineros, no nos creen cuando denunciamos "Violencia Intrafamiliar" o VIF.
Nosotras sabemos que esta llamada “VIF”, es en realidad Violencia Contra la Mujeres. Pero no podemos llamarla así porque el Estado de Chile no la reconoce...


Los funcionarios tampoco lo saben, y no lo quieren saber:

  • Nos llenan de trámites y papeleos.
  • No respetan las fechas de las audiencias, las cambian sin avisarnos (generalmente diciendo que no lograron “notificar” al agresor).
  • Cuando las audiencias se cumplen, el tiempo de espera, es eterno.
  • El trato en los Juzgados y las Fiscalías, muchas veces, es despectivo, más aún si nos ven silenciosas, pobres o humildes...
  • En Carabineros, algunas veces, los lenguajes son abiertamente inadecuados: hablan de nosotras como “piernas”, o de la Violencia como “fleta”. O el carabinero a cargo de hacer rondas, nos trata de invitar a salir, nos dice que estamos “bien buenas”, y nos acosa de distintas maneras.
  • En los Juzgados y Fiscalías, un par de veces nos han preguntado si somos feministas (como si ello fuera un crimen) o directamente nos han comentado que se ve mal que un grupo de feministas nos apoye (refiriéndose a las terapeutas del equipo de la Casa de Primera Acogida).

Esto que escribimos surge de conversaciones que hemos hecho sobre nuestras problemáticas.

LOS ABUSOS SUMAN Y SIGUEN...

  • Una compañera nuestra recibió una golpiza del agresor justo en el límite entre las comunas de El Bosque y La Pintana y ningún carabinero se hizo cargo. El agresor estaba ahí, burlándose, y no se lo llevaron preso “porque no podían hacerse cargo de una situación en el límite comunal”. Eso fue en el 2004.
  • En el 2006, otra compañera en la comuna de San Ramón, salió sangrando a la calle con dos hijos pequeños y una maleta ya que el agresor la había golpeado duramente. Ella se acercó a unos carabineros y les pidió colocar la denuncia. Ellos le preguntaron si era casada, respondió que no, que era conviviente. “¡Ah, entonces no es Violencia Intrafamiliar”, le dijeron “mejor váyase a la casa de algún familiar, señora”.
  • Hace 2 meses (2007), una tercera mujer de esta Casa, fue a buscar a su hijo a la casa del agresor en El Bosque porque éste se lo había llevado sin permiso y en estado de ebriedad. Llegó a la casa de él, el hombre la insultó, no le entregó al niño, salió y le pegó en la calle delante de su hijo. Ella llamó a los carabineros. El agresor es de la FACH, y también los llamó. Los que él llamó sí llegaron, quisieron llevársela, viéndola que sangraba (perdió dientes) y no le tomaron la denuncia.

Nunca hay forma de identificar a estos funcionarios abusivos, o no llevan el nombre en el uniforme como debieran, o no entregan el nombre, o la mujer está nerviosa, golpeada y no atina a pensar en identificarlo. Pero el problema no es ese, el problema es que cosas como estas pasan y siguen pasando.

El Estado de Chile entonces, nos agrede, por medio de estas personas y sus prácticas. Y no sólo de esa manera, la pobreza de los recursos asignados a la Ley es otra forma de agredirnos y de no oírnos: En la Nº39 comisaría de El Bosque, hay 125 medidas cautelares y sólo 3 funcionarios para hacerlas cumplir. Significa que entre los 3 deberían hacer rondas a 125 mujeres cada día…(!!!).

En principio, concluimos que si la Ley VIF no tiene dinero no puede funcionar bien, también que las limitaciones por comuna dificultan las denuncias. Pero sobre todo, pensamos que:

  • Mientras las funcionarias y funcionarios del Estado sigan haciendo sus intervenciones legales desde sus prejuicios machistas,
  • mientras no tengan capacitaciones en género, feminismo y derechos humanos,
  • mientras no se resuelva el problema entre las visitas del agresor a los hijos/as y las medidas de alejamiento,
  • mientras no entiendan que las visitas a los hijos/as son, muchas veces, tácticas de violencia del agresor,
  • mientras no se aborde el problema de la violencia de manera integral, y no apartando la tuición y las visitas, de la violencia y del divorcio...

lo que hace el Estado con su Ley VIF es REVICTIMIZARNOS ¡Y no queremos ser más víctimas! Algún día lo fuimos, pero hoy somos mucho más que eso. ¡Somos ciudadanas y queremos ser tratadas, por fin, Con Dignidad!

Grupo ACOGIDA

Mujeres participantes del Proyecto Social Casa de 1ª Acogida a Mujeres, IELCH

DERECHOS DE LAS HUMAN@S/DENUNCIA

Foto: Rosa Escobar "Atrapadas sin salida 2"
CARTA II

¡¡¡ ESCÚCHANOS SEÑOR TE ROGAMOS!!!
El motivo de mi drama (lo digo así, porque da para un verdadero culebrón mexicano!!!.), se los expongo a continuación:
Hace más de 5 años que intento (o intentaba), poner una demanda de aumento de pensión alimenticia en favor de mi hijo de 10 años, demandando a su padre: Mauricio Rodrigo Reyes González, funcionario de la FACH (y me hago responsable de la mención).

El asunto es que luego de un millar de tramites, de "ires y venires" al 1º Juzgado de Familia de San Miguel, finalmente el día 04 de abril del año en curso, un juez subrogante dictó sentencia a favor de mi hijo… Pero el cuento de hadas, no duraría mucho. Al pasar los días, que obviamente esperé, pues en los Juzgados nada es de inmediato, me percaté que no había deposito alguno. Transcurrieron 2 meses y nada. Decidí ir nuevamente al ir Juzgado de Familia e intentar apurar el asunto. Cual sería mi sorpresa al enterarme que el "padre" de mi hijo había apelado a la sentencia y esta fue modificada, sin haberme enterado jamás de tal situación. Esto perjudicó gravemente a mi hijo, pues en vez de aumentar su mísera pensión alimenticia, se la redujeron. Personalmente considero inaceptable que algunos "hombres", evadan de esta manera las responsabilidades con sus hijos, castigando económicamente a la madre, y por consiguiente perjudicando a sus hijos. No existiendo nada ni nadie que actúe a favor de los derechos de esos hijos/as.
Muchas veces las madres nos vemos atadas de pies y manos, con una "justicia de juguete" que en algunas oportunidades, vela más por los intereses económicos de los pseudopadres, que la conveniencia de nuestros hijos. Es bien triste y decepcionante que luego de luchar por mas de 5 años, para hacer justicia a favor de mi niño, este personaje que apela basado en un "escenario mentiroso", nadie se da la molestia siquiera de investigar si esta basado en la verdad, ni tampoco de informar al afectado directo, obtenga favores cambiando irremediablemente el destino de mi hijo.
Su padre no lo apoya porque no quiere, y no se trata de un problema económico, sino de la frustración de un macho acostumbrado a ganar a como dé lugar, sin importar quién o quiénes salgan perjudicados en el camino (incluyendo a los suyos).
En estos momentos la ira y el desconcierto me invaden el alma. Actualmente las visitas del padre de mi hijo, se encuentran suspendidas por violencia intrafamiliar, y tengo la firme convicción de que estas, serán reanudadas.
¿Y si me declaro en rebeldía y no cumplo con el régimen de visitas?, seguramente seré castigada, pues en ese contexto debo asumir extrema obediencia, no importando si el demandado merece o no este beneficio, pues la justicia establece que los niños no deben ser alejados de sus padres y deben tener una "figura paterna".
¿Pero qué sucede cuando esa figura está tan desvirtuada, que debemos estar constantemente explicándole a nuestros hijos?: "Mira tesoro, tu padre actúa así, por esto, por ello, o por aquello, … pero el común de los hombres no actúan es así…" (justificar lo injustificable). En ninguna parte dice que lo hagamos, pero a un niño de 10 años, es necesario aclararle ciertas conductas, para que no repitan el patrón, aunque eso no asegura que no lo repitan.
Lamentablemente en los tribunales, impera "la ley del que pestañea pierde". Me declaro incompetente en el asunto. Y ya que la justicia humana no se impone, encuentro bien patético tener que esperar "justicia divina", que es lenta, pero más efectiva… Mientras tanto… "Escúchanos señor te rogamos!!!".

Mi Caso: RIT Z 149-2006
Mi nombre: Alicia Esparza Méndez
Mi RUT: 11.789.961-6
Atendida por Casa de 1ª Acogida a Mujeres, IELCH